El 20 de marzo pasado, la Municipalidad de Quillota anunció el cierre del terminal de buses de la comuna, para evitar contagios del COVID19 en el recinto.
Pese a esto, un mes después de esa determinación, el edil identificó que comenzaron a aparecer servicios “piratas” que trasladan a una gran cantidad de vecinos sin cumplir las medidas sanitarias. Eso genera un foco de contagios que podría ser riesgoso para la salud de las personas.
Frente a esto, el alcalde Luis Mella anunció que se tomó la determinación de volver a abrir el rodoviario, pero con estrictas medidas sanitarias que aplicarán los funcionarios municipales.
“Evaluando con el equipo técnico, hemos decidido autorizar el funcionamiento del rodoviario a partir del próximo lunes. Además, vamos a instalar un equipo municipal en el rodoviario para hacer estadística epidemiológica y encuestas con gente que entra y sale de Quillota, para tener un mejor control de las personas que llegan y salen de la ciudad”, señalo la autoridad local.